Tras un inusitado madrugón para ser sábado, mas contentos por haber llegado por fin la tan esperada fecha, nos reunimos para coger el autobús que nos desplazaría hasta Madrid para disfrutar del concierto de Kamelot, Delain y Serenity. Seis negras almas somnolientas (Emilysis, Maitexxx, Dricius, Kavik, May y Enoch) nos amortajamos en los asientos entre risas. Pasaron las horas entre dormitar, charlas, sesiones musicales... y cuando quisimos darnos cuenta el autobús descendía al subsuelo para dejarnos en la estación de Madrid.
Allí nos encontraríamos con otra miembro de la web, Gabrielle, a quien, por vez primera, veríamos en persona... Un primer momento de nervios generales y rápidamente comenzamos a construir un buen ambiente de grupo, retornaron las risas, las anécdotas... mientras las estaciones de metro pasaban raudas encaminándonos hacia el lugar donde se celebraría el concierto.
Una comida rápida para calmar los gritos de estómagos abandonados, un café (buenísimo, por cierto) que nos adormeció y un buen rato de cola a la entrada de la sala Heineken. Todo ello contribuyó a mejorar aún más el ambiente, con interminables charlas y escasos silencios... no quedaba nada ya, y todo marchaba a la perfección.
Para cuando quisimos darnos cuenta estábamos ya en la oscuridad de la sala Heineken... mientras algunos se lanzaron sobre el stand de productos de las bandas (Emilysis, Maitexxx, Dricius y May), donde saquearon lo que les vino en gana (sobre todo la amiga Maitexxx, que por sus "escasas" compras recibió regalos varios) el resto (Gabrielle, Kavik y Enoch) nos dirigimos a ubicarnos cerca del escenario y proveernos de algo con que remojar nuestras gargantas y ánimos... para nuestra decepción en las barras de la sala no había Jack Daniel's, ni Vodka Negro, ni... ni... imperdonable.
El comienzo del concierto no se hizo esperar, y aunque pensábamos que sería Serenity quien abriese, de repente nos encontramos con Delain sobre el escenario.
El sonido fue un tanto deficiente en los primeros temas, pero lo suplió el buen hacer de la banda sobre el escenario. Pese a mucho gustarnos a más de un@ su música, no sabíamos que esperar de ellos en vivo y muy grata fue la sorpresa. Todos sus componentes gustaron y fueron agradables con la audiencia, y su solista, Charlotte, sorprendió con una eterna sonrisa, guiños por doquier y una actitud digna de una front-woman del gothic metal... eternos fueron sus giros de cabeza batiendo su melena totalmente entregada (cosa que ya echábamos en falta últimamente en este tipo de cantantes).
Con su segundo album "April Rain" con apenas unos días en el mercado, muchas de las canciones resultaron prácticamente novedosas y fue complicado entregarse al frenesí coreándolas, pero las defendieron muy dignamente. Quizás si una pega le podemos sacar al concierto de Delain, fue el repertorio elegido, que hallamos mejorable, se dejaron grandes temas en el tintero para sustituirlos por otros más insulsos. Igualmente, las partes en las que junto a Charlotte se requerían voces guturales, estas fueron también un tanto sosas, poco nos faltó para subir a Dricius al escenario a interpretarlas ;).
Aún y todo disfrutamos a tope de este breve concierto de Delain, con temas tan míticos ya como "Day for Ghosts", "April Rain" y un largo etcétera... con su buen hacer, con cuánto más "metalero" sonaba su nuevo album en vivo que el CD, con cuánto más hermosa resulta Charlotte en persona, con las risas, los primeros meneos de melenas... pura adrenalina y una ilusión superada y aprobada con nota.
Tras una no muy larga espera y un tanto molestos por un trío de elementos que en el último momento se colaron a empujones en el medio de la cuadrilla separando el grupo Kamelot tomó con fuerza el escenario (pasmados de que ello demostrara la ausencia de Serenity, y más aún de que nadie lo anunciara ni diera explicación alguna, sin comentarios).
Emocionados y ya más conocedores de un repertorio bastante más acertado que el de Delain que recorrió la carrera musical de la banda de sus más recordados antiguos hits a los más cercanos en el tiempo, comenzamos a disfrutar de un gran concierto. Botes, canciones cantadas a gritos, cabezas girando, risas... así fueron pasando ante nuestros ojos y oídos los temas del grupo. Ellos, sobre el escenario, no dejaron en ningún momento de interactuar con el público, intercalándolo con sus habituales puestas en escena oscuras y teatrales a ratos. Con especial cariño recuerdo varios temas de los elegidos, como el "Center of the Universe" que nos enloqueció, así como el "Somewhere in time (the haunting)", que nos terminó de desatar. Máscaras salieron al escenario para hacernos botar con su más reciente "Ghost Opera" (disco del que no eligieron muchos temas, cosa que nos gustó), luces tenues para las baladas y una apoteósis final con el tema que a todos nos faltaba, el increíble "March of Mephisto", con el que dieron un cierre muy visual (comenzando con las damas enmascaradas con tambores), muy potente, (rara vez tantos miembros de este sitio he visto tan entregados y tan en su galaxia personal como durante ese tema...) y que consiguió firmar la sentencia que les condena a nuestra asistencia a otro de sus conciertos.Quizás lo único criticable de la actuación de Kamelot es su costumbre (necesaria, supongo) de introducir solos de los diversos instrumentos, que no son en absoluto destacables y que hacen que baje mucho el ritmo del concierto, al igual que con las interminables charlas... queríamos más de su música y más de la caña que nos demostraron que saben dar. De todas formas, y pese a estas salvedades, supieron dar un concierto fantástico y que todos saliéramos de la sala más que satisfechos.
Un rápido tentempié, un breve descanso para nuestros pies, piernas y cuellos y acto seguido a disfrutar de la oscura noche Madrileña con una guía inigualable, Gabrielle.
Las sombras nos condujeron por el 666, Moscow, y Excalibur, lugares donde continuamos disfrutando, conociéndonos más y más, charlando sin fin, dejando que el Jack Daniels y otras bebidas espirituosas sustituyeran nuestra sangre y el buen humor desterrara toda incertidumbre previa que pudiera haber sobre el viaje y su resultado... Encuentros inesperados con amigos de este sitio de Burgos (imaginad nuestras caras cuando en mitad de Excalibur pasa alguien vistiendo la camiseta "Ravenheart")... y una noche demasiado corta para tanto sitio que queríamos visitar, tanto de lo que queríamos hablar, tanto que queríamos disfrutar... cuando quisimos darnos cuenta, el astro rey comenzó a alzarse amenazando desintegrarnos con su luz.
No quedó otra opción que despedirnos con un "hasta la próxima" de Gabrielle, una promesa, un abrazo y de nuevo al autobús que nos devolvería a la realidad... alguna anécdota que otra en la estación para terminar con las risas (a partir de la cual Kavik estará eternamente nominada a pedir los billetes de regreso para revivir el momento, jejeje)... y pronto gargolizados en los asientos, despertando apenas para la parada de rigor (donde Maitexxx nos regaló una inolvidable performance que ya amenazó desencajar nuestras mandíbulas ya agotadas de reír) y de nuevo al hogar...
Así vivimos esta aventura, y desde aquí mi agradecimiento a los miembros de este sitio que asistieron y contribuyeron a que esta pequeña aventura se tornase inolvidable, y entre ellos especialmente a Gabrielle por tratarnos como reyes, ser la perfecta anfitriona y particularmente a mi, Enoch, recordarme la existencia del destino y que, a veces, puede ser benefactor de sonrisas y regalarnos instantes de algo parecido a la felicidad.
Esperamos reencontrarnos todos y que a estas criaturas oscuras se vayan uniendo más razas de noche para próximos eventos que ya se irán comentando en los foros de este sitio... y como cierre y bajo estas líneas os dejamos un video de cómo fue el concierto, cómo lo vimos... esperamos vuestros comentarios!
COMENTARIO DE GABRIELLE:
”Poco hay que pueda aportar al escrito de Enoch sobre aquel día, salvo que te has olvidado de decir que Kamelot abrieron la sesión con el "Rule the World" (lo que hizo que mi adrenalina se disparara a límites insospechados)
Mis nervios eran bastante grandes, pues no sabía con qué 6 personas me iba a encontrar (salvo sus alturas) y ... dios bendito!!! sí que sois altos, jejeje.
Es cierto que a medida que iba pasando el día los momentos de silencio absoluto iban decreciendo, hasta que se rompieron absolutamente en el Starbucks con unos buenos cafés (con nata algunos de ellos para delicia y goloseo de los presentes), buenas charlas, risas y conversaciones sobre el ambiente de marcha en Madrid y en Donosti.
El momento "cola de concierto" fue increíble, viendo desfilar muchachas con diversos estilos y vestimentas para deleite de las féminas allí presentes, pensando en modelitos que ponerse o si eso quedaba bien o no jijijiji (hay que ser malas de vez en cuando, no?) El concierto no pudo definirlo Enoch de mejor manera, mientras unos compraban e iban al baño otros buscábamos sitio decente para ver bien a los grupos (salvo las 3 ratas que se metieron malamente entre nosotros)
Y tras un pequeñísimo kit-kat llegó el momento de saborear la noche madrileña, y vaya noche! no podía haber sido mejor, sobre todo en los momentos en los que las chicas atacan a Montse en la barra del 666 para decirle que les gustarían unos vasos anchos para beber, que no les gustan los vasos de tubo, y ... ahí estaban esos vasos, sí señor!!!! El momento Moscow también fue inolvidable, y de ahí quedan las sesiones fotográficas que obran ya en nuestro poder, buena música y buenos bailes del personal asistente al concierto, incluyendo el bailecito que Dricius nos brindó a todos, OLE OLE y OLE!!! Excalibur ... mmm, qué decir de ese sitio. Buenísima música, buen ambiente, muchas risas, cara de sorpresas cuando dicen que han visto a alguien con la camiseta del grupo, más bailes, más bebida y... cierre final a eso de las 7 de la mañana en la parte superior del local con el STILL LOVING YOU de Scorpions, mientras al lado de Maitexx y mio había un tío haciendo unas contorsiones un tanto extrañas jijijiji
Y llegó el momento del adiós. El amanecer madrileño marcaba que esa jornada de juerga madrileña tocaba ya a su fin, y tras la llegada de 2 taxis que alejaban de mí a estos chicos llegaron los besos, despedidas, abrazos y agradecimientos de todo el mundo, aunque mi mayor agradecimiento esa noche (y las venideras) es el haberos conocidos chic@s, sois grandes, muy grandes (en todos los sentidos) .
Eternamente agradecida a todos por esa noche y espero que haya sido el principio de muchas más noches juntos y, ya ves Enoch, el destino (nuestro destino) siempre nos deparará agradables sorpresas, eh?
Un beso y un abrazo con todo mi cariño, confiando que haya más conciertos juntos.”
Gabrielle
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